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LA TROMPETA DE JERICÓ

Y el premio Nobel es para…

Imagen entrega premio Nobel

Los premios Nobel aparecen cada cierto tiempo como invitados en la televisión. Nos presentan la categoría y el ganador (que a no ser que uno esté puesto en el mundillo, suele ser un total desconocido para nosotros), y los medios de comunicación le dedican unos cuantos segundos a hablar de por qué lo ganó. Pero detrás de estos premios hay varias historias curiosas ligadas a un hombre cuyo invento más conocido fue la dinamita y que parece ser que no guardó mucho afecto a las matemáticas. Sin duda estamos ante uno de estos hombres curiosos de los que la historia está repleta y del que se puede obtener una moraleja valiosa si se le presta atención.

¿QUIÉN FUE ALFRED NOBEL?

ÍNDICE DEL POST

    alfred nobelAlfred Bernhard Nobel, nació en 1833 en Suecia. Estuvo muy marcado por la influencia de su padre, Immanuel, inventor e ingeniero, el cual debido a su profesión estaba en constante movimiento por la Europa de la época. A muy tierna edad demostró que tenía una inteligencia muy desarrollada y colaboró con su padre en diversas patentes aprendiendo los entresijos del negocio de inventor y del campo de la química (muy ligado a la tipología de inventos militares). Pero además de sus conocimientos de química, destacó en idiomas, diciéndose que con sólo 17 años era capaz de hablar sueco, inglés, francés, alemán y ruso (añadiendo al final de su vida el italiano).

    Pero pronto se dio cuenta de que si quería llegar lejos debía emigrar, y así lo hizo, viviendo varios años en Francia, Estados Unidos y Rusia. En esta época aparecieron sus primeras patentes, que aunque fueron diversas, parece ser que las que realmente atrajeron la atención fueron las ligadas al campo de los explosivos.

    dinamita Nobel¿Por qué? Fundamentalmente por dos razones. La primera era por el ámbito de aplicación que podía tener en la minería, y la segunda, la que realmente lo catapultó a la fama, por el gran campo que en el terreno militar abría. Fueron varios los líderes militares de la época que vieron en su invento más famoso, la dinamita en 1867, un punto de inicio para potenciar una de las armas más peligrosas que ha inventado el ser humano: la artillería y las bombas.

    Pero Alfred se dio cuenta del monstruo que estaba creando. Era cierto que sus inventos eran un éxito y ayudaron en la minería, pero quedó muy marcado cuando vio los avances que sus patentes de explosivos habían provocado en el campo militar. Esto contribuyó a crearle una aureola de “ángel portador de la muerte”, lo que le hizo entrar en una especie de crisis existencial y que en su última etapa de vida llegase a convertirse en un firme pacifista.

    Testamento Alfred Nobel
    Testamento de Alfed Nobel donde deja en herencia el 94% e su fortuna para la creación de los premios que llevan su nombre

    Y este cambio pacifista se reflejó cuando decidió que no quería ser recordado tras su muerte por sus inventos explosivos (como sí le ha pasado a otros como Kalashnikov). En su testamento señaló que dejaba el 94% de sus bienes (lo que provocó que sus herederos intentasen impugnarlo) a la creación de unos premios que reconociesen a aquellas mentes cuya aportación a la ciencia fuese destacable: Nacían así los premios Nobel.

    Y así llegamos a 1896, cuando el reloj biológico de Alfred se apagó, dejando unas 350 patentes, casi 100 factorías armamentísticas y unos premios que tendrían tal éxito que en 2015 han cumplido 114 años.

    UNOS PREMIOS DE ELEVADO PRESTIGIO

    En la actualidad, pese a que a nivel popular no lleguen a calar hondo, se puede afirmar que si una persona recibe uno de estos premios, su reconocimiento en el mundo de la ciencia asciende meteóricamente, llegando a convertirse en una eminencia. Pero viajemos a su origen:

    En su testamento, Alfred definió cinco categorías de premios, las cuales empezaron a otorgarse en 1901, cinco años después de su muerte:

    “Los tres primeros otorgados a eminencias en Física, Química y Medicina o Psicología; El cuarto en literatura entendida como una dirección ideal y el quinto otorgado a la persona o sociedad que haya realizado el más grande servicio a la causa de la fraternidad internacional, la supresión o reducción de ejércitos y armamentos y el establecimiento de congresos de paz”.

    El último premio, que al final quedaría simplemente como “Nobel de la Paz”, se dice que fue muy influido por Bertha Von Suttner, una de sus secretarias.

    medals1Pero el éxito de estos premios provocó que en 1968, bajo el auspicio de una fuerte donación de un banco escandinavo, naciese un nuevo premio: El Nobel de Economía (tan laureado hoy en día). Este Nobel fue otorgado por primera vez en 1969, no habiendo habido nuevas incorporaciones desde esa fecha, por no querer los organizadores desvirtuar mucho la idea original de Alfred.

    ¿Llevan dotación económica los premios? Pues sí, y desde 2012, por cada Nobel recibido se otorga la nada despreciable suma de 850.000 euros al portador (8 millones de coronas suecas), valor que se divide en función del número de galardonados.

    Os dejo a continuación un enlace con la página oficial donde se pueden consultar todos los ganadores de los premios desde su creación. Merece la pena “bichear” un poco en ella:

    https://www.nobelprize.org/prizes/lists/all-nobel-prizes

    nobel reparto

    Y antes de continuar, me gustaría mencionar a los 8 españoles (realmente 7 como ahora señalaré) que a lo largo la historia de los Nobel han recibido este galardón:

    Santiago Ramón y Cajal (1906) y Severo Ochoa (1959) el de medicina y psicología.

    José de Echegaray (1904), Jacinto Benavente (1922), Juan Ramón Jiménez (1956), Vicente Aleixandre (1977), Camilo José Cela (1989) y Mario Vargas Llosa (2010) el de literatura. El último Nobel, el de Vargas Llosa no es 100% español, pues el literato nació en Perú, aunque desde 1993 cuenta con la nacionalidad española (lo que hace que muchas fuentes lo consideren como Nobel español).

    ¡YO QUIERO UN NOBEL!

    Si estás interesado en recibir uno de estos galardones, sería interesante primero plantearte si tu esfuerzo en algún campo de la ciencia está teniendo resultados factibles, pues la organización asegura que los galardones no se otorgan para premiar la carrera de una persona, sino para algo que realmente destaque y “abra puertas”. Además de esta aportación, el otro principal requisito es pertenecer al mundillo de la categoría del Nobel al que se quiera aspirar (lógicamente).

    nominacion nobelEl proceso comienza cuando diversos organismos envían las nominaciones de cientos de personas para su estudio, teniendo un comité de expertos la dura tarea de filtrar y elegir a los más relevantes, para al final elegir a uno o varios candidatos o incluso una organización entera. Todo este proceso dura alrededor de 15 meses (ya que las nominaciones van de septiembre a enero y los premios se otorgan en diciembre).

    Pero como tantas cosas en la vida, los premios Nobel no están exento de polémica, pues ha habido casos en el que el ganador no ha gozado de las simpatías del público, como el Nobel de la paz otorgado al presidente de los Estados Unidos Barack Obama. Pero supongo, que como cualquier decisión, tiene sus simpatizantes y detractores, y a pesar de las críticas, estos galardones siguen contando con una enorme reputación.

    Así que si te crees merecedor de un premio Nobel, no dejes de intentarlo y ante todo recuerda que lo importante no es el premio, sino el avance que provoques en un campo de la sociedad.

    ¿Y EL NOBEL DE MATEMÁTICAS?

    Y llegamos al apartado prensa rosa de los premios. Desde hace muchos años, circula una historia por la red referente a por qué no se otorga un premio Nobel a las mentes más brillantes de las matemáticas. Tras mucho consultar, muchas fuentes la dan como falsa, pero es divertida contarla:

    Gösta Mittag-Leffler el supuesto matemático amante de la mujer de Alfred
    Gösta Mittag-Leffler el supuesto matemático amante de la mujer de Alfred

    El chisme sitúa a que la mujer de Alfred Nobel tuvo un affaire con un matemático de la alta sociedad sueca: Gosta Mittag-Leffler. Este rumor, al conocerlo Alfred, fue suficiente para que guardase rencor el resto de su vida a esta rama de la ciencia, evitando que surgiese esta categoría.

    Pero ni hay registros de que Alfred estuviese realmente casado, ni de que llegase realmente a conocer a Gosta. Pero ahí queda.

    Lo más sensato es pensar que como con la ingeniería y otras ramas, las matemáticas no fuesen consideradas por él como merecedoras de este galardón debido a que no le causaban mucho interés o a que no era capaz de discernir claramente su influencia en la sociedad.

    BIBLIOGRAFÍA

    Para terminar, os dejo la principal bibliografía consultada (la mayoría en inglés), para que buceéis por los entresijos de este premio y la vida de este inventor. Así mismo os dejo un vídeo de 15 minutos de duración con un resumen de su vida (os recomiendo que lo veáis):

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