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LA TROMPETA DE JERICÓ

La carrera sudafricana

DOS AVENTUREROS, UN CABALLO Y 600 MILLAS A LA CARRERA

ÍNDICE DEL POST

    Dick King

    Esta semana os traigo una historia muy curiosa y que encontré en un libro que estoy leyendo en este momento. Hace unos días comencé a leer sobre el pueblo Bóer, pueblo de origen europeo desarrolló su actividad por las tierras de lo que hoy conocemos como Sudáfrica. En concreto, la anécdota que os traigo corresponde a un colono británico, Dick King, y su sirviente, Ndongeni. Ambos llevaron a cabo un sorprendente viaje para advertir a su alto mando del peligro que corría Port Natal (Durban en la actualidad). Pero no nos entretengamos más y veamos esta aventura a través de las tierras sudafricanas.

    TIERRA DE BÓERS

    Antes de meternos de lleno en el tema, dejadme que explique muy someramente quiénes eran los conocidos como Bóers. La palabra, que viene a significar granjero, hace directa referencia a un habitante de origen holandés y establecido en lo que hoy es Sudáfrica. Se trató de un pueblo de raza blanca que vivió una epopeya abriéndose camino entre tribus hostiles e invasiones por parte de los británicos. Esto ha provocado que hayan pasado a la historia por su determinación y feroz resistencia de su territorio. Tiempos difíciles en zonas hostiles.

    Aunque los portugueses fueron los primeros en llegar y asentarse en lo que hoy conocemos como Ciudad del Cabo (en el sudoeste de Sudáfrica), su asentamiento no prosperó debido a la belicosidad de las tribus cercanas. Posteriormente, a mediados del siglo XVII, los primeros colonos holandeses llegaron y pudieron establecer colonias a lo largo de la costa.

    A estos colonos se le sumarían franceses hugonotes que huían de las persecuciones religiosas de Europa y colonos de diversos estados alemanes. Esta primera masa tenía generalmente en común su predilección por la religión protestante calvinista, destacando la conocida como iglesia reformada holandesa. Y pese a lo duro de las condiciones del terreno, pudieron desarrollarse hasta que los británicos vieron con mucho interés la zona y comenzaron a mandar colonos y soldados.

    Los Bóers, pese a resistir, poco pudieron hacer frente a los británicos. Y rechazando convertirse en sus súbditos,  comenzaron su camino hacia el interior de Sudáfrica, en lo que ha pasado a conocerse como el Gran Trek. Pero estas tierras estaban ocupadas por tribus nativas, lo que provocó una serie de encontronazos salvajes con multitud de tropelías.

    Gran Trek
    Mapa con ejemplos del Gran Trek, la gran migración Bóer al noreste de Sudáfrica.

    Pero y para colmo de males, cada vez que se asentaban en una zona con un gran potencial como un buen puerto o riquezas como suelo fértil y minerales, los británicos asomaban el rifle y la bayoneta. Y es de este modo como las hostilidades comenzaban.

    NATALIA Y CONGELLA

    Y de todas las confrontaciones, la que nos interesa en esta entrada es la que Bóers y británicos llevaron a cabo en la conocida como República de Natalia o Natal. La misma había sido establecida por los Bóers tras la conocida como batalla de Río Sangriento, en la cual éstos derrotaron duramente a otro pueblo conocido como zulúes.

    Los británicos, temiendo que los Bóers estableciesen una república con un buen puerto, decidieron ocupar la costa en Port Natal.  Ciudad que con el tiempo se convertiría en Durban. Pero al no tener el suficiente apoyo de la colonia británica de El Cabo, se acabaron marchando. Eso sí, sin quitarle el ojo a la zona en el caso de que los Bóers comenzarán a expandirse o a crecer demasiado. Y cuando creyeron que sus intereses podían verse perjudicados, pasaron a la acción, llegando a enviar un contingente para tomar Natal y expulsar a los Bóers.

    Y así nos encontramos en mayo de 1842, cuando aprovechando la oscuridad de la noche los británicos atacaron la ciudad de Kongela o Congella. Los Bóers, parece ser que alertados del ataque dejaron acercarse a los británicos para que cayesen en la trampa. Una vez suficientemente cerca, abrieron fuego y provocaron el fracaso del ataque, poniendo a los británicos en retirada.

    Port Natal
    Mapa de Port Natal, Durban en la actualidad

    El capitán Smith, al mando de la expedición británica, sabía que no tenía refuerzos ni tropas suficientes para defender Port Natal. Aun así retrocedió hasta la ciudad y se atrincheró en lo que sería conocido como “Old Fort”. Parte de su tropa permaneció embarcada en el puerto, aunque también asediada y con difícil salida. Pese a esta protección, esto no bastaba, ya que los Bóers eran superiores en número y comenzaron a asediar a la ciudad. Todo parecía indicar que los británicos no aguantarían mucho tiempo.

    Y es aquí cuando el capitán Smith decide mandar a alguien de confianza al centro de mando británico más cercano, en Grahamstown. Allí debería dar la voz de alarma y reclamar tropas  de socorro que, viniendo en barco, levantasen el asedio y salvasen Port Natal para los intereses británicos.

    Pese a que este envío para pedir ayuda pueda sonar normal, dejadme dar unos datos para demostrar la magnitud del cometido. Si hoy en día quisiéramos ir de Durban (Port Natal) a Grahamstown, existe una autovía de unos 800 kilómetros de distancia que permite hacerlo en unas 10 horas en coche. Pero en la época, no existía esa carretera y había que sortear multitud de accidentes geográficos como ríos y montañas, amén de cruzar por zonas llenas de belicosas tribus. La distancia por lo tanto, se incrementaba hasta las 600 millas terrestres, lo que viene a ser unos 965 kilómetros, casi nada. Por dar un orden de magnitud, se trata más o menos de la misma distancia en línea recta que existe entre Huelva y Gerona (lo que viene a significar cruzar toda España).

    Durban Grahamstown
    Mapa de google maps que muestra la distancia existente entre Durban y Grahamstown.

    ¿Y a quién le iba a tocar semejante tarea? Al fin entran en escena dos aventureros, Richard Philip «Dick» King y su sirviente de 16 años Ndongeni.

    DICK KING Y EL MENSAJE CRUCIAL

    He de advertir que pese a que el hecho principal que os voy a narrar se da por cierto en la totalidad de las fuentes consultadas, los detalles del mismo lamentablemente varían.

    ¿Quién era Dick King? Parece ser que nació en 1811 en el Reino Unido y llegó a Sudáfrica con su familia en la década de los años 20 del siglo XIX, como parte de una nueva etapa de colonización. Desde joven demostró tener un carácter temerario, participando en peligrosas acciones contra tribus nativas e incluso estuvo en alguna ocasión a punto de ser devorado por fieras salvajes. Respecto a su sirviente, Ndongeni, también protagonista de nuestra historia, poca información he podido encontrar.

    Dick King
    Fotografía de Dick King

    Volviendo al capitán Smith, no está claro si asignó la tarea a Dick King o si éste se presentó voluntario, pero de nuevo, no era una tarea fácil. Aprovechando la oscuridad de la noche, Dick y Ndongeni se escabulleron a través del bloqueo y tomaron rumbo a Grahamstown, en una carrera sin apenas descanso durante 10 largos días a caballo. Mencionar que fuentes señalan que esta distancia se hacía normalmente en 17 días, tomando los necesarios descansos.

    Y aquí también quiero hacer mención de otros protagonistas; Los caballos. Concretamente el de Dick, llamado Somerset, demostró tener una resistencia increíble avanzando casi sin descanso por el duro terreno sudafricano. Sobre el caballo de Ndongeni, algunas fuentes señalan que falleció de cansancio pasadas unas 200 millas (un tercio del viaje), teniendo el sirviente que o cabalgar en el mismo caballo que Dick o ir corriendo detrás de él hasta intentar encontrar un reemplazo. Lamentablemente éste no llegó, por lo que entiendo y así lo mencionan algunas fuentes, el sirviente tuvo que continuar sólo a pie o regresar, algo de nuevo complejo en un territorio tan hostil.

    Ruta seguida por Dick King y Ndongeni
    Imagen con la ruta de Dick King y Ndongeni

    GALOPANDO A TRAVÉS DE SUDÁFRICA

    Y así Dick King siguió galopando y atravesando complicadas barreras naturales como los montes Drakensburg, 154 ríos (de los cuales 28 eran muy caudalosos y muchos estaban infestados de cocodrilos), tribus nativas hostiles y animales salvajes. Os podéis hacer a la idea de que no fue una tarea fácil. El caballo debió de pasarlo mal y el jinete tuvo que sufrir lo indecible al mantener casi siempre la misma postura en el caballo. He leído que debido al clima, enfermó y tuvo que hacer parte del camino en un estado lamentable.

    Pero por fortuna para él, al décimo día (la media sale a unos 100 kilómetros diarios), arribó a su destino en Grahamstown. Al llegar, su estado era lamentable y estaba cubierto de polvo hasta el punto de hacer sus facciones casi irreconocibles. Tuvieron que ayudarle a bajar del equino e incluso, debido a la hinchazón de sus pies, tuvieron que cortarle las botas con unas tijeras para poder quitárselas. También, debido al cansancio, se pasó durmiendo los tres días siguientes. Pero el objetivo inicial se había cumplido: Había podido avisar a la guarnición británica del riesgo que corría Port Natal.

    Sin perder apenas tiempo, los británicos organizaron una fuerza de socorro por mar, la cual arribó a Port Natal alrededor de un mes después del inicio de la aventura de King y Ndongeni. Para regocijo británico, la misma llegó a tiempo, levantó el cerco y salvó Port Natal. Al final, los británicos conseguirían expulsar a los Bóers y hacerse con el territorio, algo que sin duda hubiera sido más complicado de no haber mantenido esta ciudad portuaria.

    RECONOCIMIENTOS

    ¿Cómo se premió a los dos aventureros? Ambos recibirían una extensión de terreno para su uso personal y he oído que Dick King recibió una suma que va entre las 15 y las 90 libras (de nuevo varía según la fuente consultada).

    Pero ahí no acabaría la cosa. En 1915, se inauguró una estatua de bronce en Durban que representa a Dick y su caballo, en reconocimiento a su tarea. Lamentablemente, en este homenaje se olvidó al Ndongeni, el fiel sirviente de 16 años. Esto traería polémica hace pocos años, ya que sumado a la nueva tendencia de despreciar el pasado colonial, ha provocado que la estatua fuese vandalizada con pintura y que algunos hayan solicitado que sea retirada.

    Estatua Dick King
    Estatua homenaje a Dick King y su caballo Somerset. Lamentablemente se olvidaron de Ndongeni

    Esta retirada sería considerada como un error por un servidor, quien estaría de acuerdo en que, para hacer justicia, se le añada una nueva estatua con Ndongeni. El tiempo dirá que solución se llevará a cabo.

    Sin duda una excelente historia de aventuras enmarcada en un proceso tan duro y complejo como fue la lucha entre Bóers, británicos y tribus nativas. Otro ejemplo más de que las personas podemos llegar a realizar grandes gestas con determinación y voluntad. Si os gustó, os dejo con otras entradas sobre hechos históricos del siglo XIX.

    ¡Nos vemos la semana que viene!

    BIBLIOGRAFÍA

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