Saltar al contenido
LA TROMPETA DE JERICÓ

La guerra del pan

sp_bs_clip_image002

Partimos de un negocio de un producto alimenticio concreto, con un mercado ya muy definido. De la noche a la mañana, un empresario, saca a la venta ese producto pero tres veces más barato. Aunque al principio surgen dudas de su calidad, el bajo precio y la crisis económica actual hacen que la gente vaya directa a comprar ese producto, acción que se ve respaldada cuando los organismos de higiene certifican que es apto para el consumo (aunque la calidad del mismo es inferior a la media).

El negocio de este señor se ve rápidamente en aumento, viéndose perjudicados los negocios cercanos, de modo que sus ventas caen en picado. Esto causa la alarma en estos negocios y el gremio en cuestión se reúne para tratar de buscar una solución (la primera medida es expulsar al empresario por competencia desleal). Mientras tanto, debido al éxito del primer empresario, decide abrir más establecimientos con el fin de obtener mayor cuota de mercado y beneficios.

Ahora es cuando surgen las preguntas:

  • ¿Cómo puede obtener un producto que pasando los controles de sanidad sea tan barato?
  • ¿Acaso está produciendo con pérdidas para absorber el mercado y una vez controlado todo subir el precio?
  • ¿Ha optimizado tanto la producción que ha disminuido al máximo todos los costes posibles?
  • ¿Acaso el precio de este producto en el mercado estaba muy inflado?
  • ¿Cuál es la medida más efectiva para contrarrestar esta estrategia comercial?

Y es aquí donde surgen los problemas. Por un lado, existe el inmovilismo clásico del resto de negocios de venta de la zona, donde tras años de experiencia, tienen su producto particular pero con el precio adaptado y pactado con el resto de integrantes del gremio. Este inmovilismo les impide por lo tanto darse cuenta de que si el otro negocio vende más es porque en la actualidad, debido a la situación económica, no prima la calidad sino el precio, por lo que para adaptarse es necesario reducir el precio. Además, partiendo del inmovilismo y al verse afectados los otros negocios (dañando su capacidad económica de producir un sustento para muchas familias), surge un sentimiento de cabreo, rabia e ira contra el primer empresario. Este sentimiento es clave, pues provoca que entre los diversos miembros del gremio, en vez de coordinar una gran respuesta empresarial (ellos son más y en cambio el otro es un único empresario), se producen acuerdos para actuar al margen de la ley chantajeando a los suministradores de material del otro empresario, acosando a sus empleados y realizando toda una serie de medidas coercitivas.

¿Pero por qué? Lo primero, es que nada une más a un grupo de personas como el odio hacia algo. Evidentemente, el hecho de no alcanzar un acuerdo entre los miembros del gremio refleja que entre los mismos miembros no hay confianza ni la más mínima voluntad de entendimiento racional. El problema de sus negocios, pasa por interpretar las nuevas condiciones del mercado, y ante el riesgo de cierre, lo lógico sería buscar soluciones para salvarlos (a grandes males, grandes remedios).

Todas estas actuaciones no muy legales del gremio, son acciones que dañan sus propios intereses. Y los dañan porque por un lado esto ha ocasionado multas a diversos miembros que sumadas a la delicada situación económica pueden provocar la ruina total de sus negocios. También esto afea la imagen del gremio, lo convierte en el foco de atención de la prensa y la policía, provocando la pérdida de credibilidad del consumidor en él y en sus productos. Aunque hay que señalar que tras indagar un poco, he visto que no todos los miembros están de acuerdo (algunos han creado un producto similar de menos tamaño y precio), pero al quedar englobados dentro de él, el ojo de la sospecha también cae sobre ellos.

barra-pan-artesanoSupongo que muchos habréis adivinado de que producto se trataba, ese producto estrella y básico en casi cada hogar español: ¡EL PAN!

A esta pugna por el pan, se le conoció como la guerra del pan, y se dio en Valencia y los alrededores (noticia).

Y ante todo esto, me surgen las siguientes preguntas éticas:

¿Es justo especular con un producto de primera necesidad como el pan, aún sabiendo que va a revolucionar el mercado?

¿Son justificadas las medidas coercitivas del gremio contra este empresario con el fin de salvar sus negocios y tener un ingreso con el que alimentar a sus familias?

¿Actúa el empresario bien haciendo esa estrategia agresiva que sabe que va a producir la ruina de muchos negocios, aunque el ahorro de muchas familias que verán reducido el gasto en ese alimento?

¿Hasta qué punto el ahorro y la calidad de lo que consumimos son compatibles con una alimentación sana?

indexEn el caso de que el empresario esté poniendo un precio bajo para controlar el mercado y luego subirlo (el gremio asegura que produce en régimen de pérdidas), ¿Es ética esta estrategia comercial para controlar el mercado y expulsar del mismo a los competidores, sabiendo su inmovilismo?

Son muchas las preguntas y actuaciones que he explicado o formulado, teniendo todas sus puntos a favor y sus puntos en contra, y con una fuerte carga psicológica ya que lleva consigo el sustento de familias.

¿Mi opinión al respecto? Digamos que evidentemente el producir un producto más barato, ayuda a las familias compradoras de pan pero al mismo tiempo al tener menor calidad el producto, la salud puede verse resentida a la larga. En cuanto a la estrategia comercial, de inicio puede verse como un salto a la hora de “modernizar” el sector de la venta de pan, con un riesgo asumido por el empresario, pero si el objetivo es controlar el mercado para luego subir el precio, significará que de la noche a la mañana, un nuevo formato de pan, con menor calidad será el imperante en el mercado, cosa que personalmente no comparto.

Espero haber motivado la reflexión de los que hayan llegado a este punto, y pido perdón por haber escrito una entrada más larga que un día sin pan ;).

SI HAS LLEGADO HASTA AQUÍ, ¡SUSCRÍBETE!

¿Te ha gustado el contenido? ¿Te gustaría estar al tanto de todas las novedades del blog? ¡No lo dudes y suscríbete!

Imagen con botón de sucríbete

Te informamos que tus datos se van a almacenar de forma segura y que cumplimos con el RGPD (Reglamento General de Protección de Datos). En la Política de Privacidad del blog tienes más información al respecto. Para cualquier rectificación, limitación y supresión de los datos, puedes hacerlo a través del presente formulario de contacto.

Configuración de Cookies